Un perro sobrevive quince días en un acantilado de Cedeira
La historia de Sil , un perro de raza azul de Gascuña, ha corrido de boca en boca por todas las cuadrillas de caza de Cedeira y Ortegal.
Cuando ya sus dueños lo daban por muerto en una partida, ha aparecido en el fondo de un acantilado próximo al faro de San Antonio de Corbeira. Los hermanos Nicolás y Miguel Iglesias Orjales, de 22 años, conocidos como Os Xemelgos de Cerdido , son los dueños.? Ambos se unieron a una partida de cazadores de la asociación de Cedeira y Cerdido y emprendieron la batida por los montes de A Capelada. Era el sábado 7 de diciembre y Sil , junto a un segundo perro, levantó el rastro de un puerco de unos 70 kilos. Los más de veinte cazadores del grupo siguieron a los animales, que bebían los vientos tras el bicho, cuidándose de no ser alcanzados por las cuchillas de sus colmillos. Pero los perros se separaron de la partida y persistieron en la persecución, perdiendo el contacto con sus dueños.«Quince días despois -narra Nicolás- José Antonio do Esteiro volveu, porque o outro can era de el. Asubiou e escoitouno ladrar». Cuál no sería su sorpresa al acercarse al acantilado y ver que el que ladraba era Sil. El grupo volvió al lugar y uno de ellos descendió con una cordada. Allí encontraron el perro de Nicolás, el cadáver del de José Antonio, y los restos del jabalí que alimentaron a Sil
Um final feliz
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Se calhar eu queria um mundo perfeito e gostaria mais de ler que se salvaram os dois. No entanto, fico feliz pelo que foi encontrado com vida, é uma história feliz na sua vida e do dono com certeza. Obrigada Fab.
Carla
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